Ruta 2016. Nido del Águila. Día 3.
Día 3. Riva del Garda - Annaberg im Lammertal. 7/09/2016
De vuelta al Grossglockner.
Lista para un bonito día de curvas?
Ready to go!
90km de autopista que ya empiezan a atragantarse un poco, pero es lo que hay.
Y más peajes, pero con alegría todo se lleva mejor.
Paradeta a merendar.
Espectaculares vistas, que si es la primera vez que pasas por aquí, no te podrías llegar a creer lo que hay de detrás...la espectaculares e inolvidables Dolomitas.
FOTO!
Volveremos...Volveremos...Volveremos...
Bienvenidos a Austria!
Si, justo desde donde hago la foto es donde nos decidimos parar a merendar...el sitio era perfecto jejeje
Pero mirando hacia el otro lado...
La puerta de entrada a la Grossglockner Hochalpenstrasse.
Ascendemos entre vistas fantásticas. La última vez que estuve por estos lares fue en junio de 2012. En esa ocasión la nieve era la principal protagonista del paisaje.
Preciosa.!
Y por fin el Glaciar!
Me emociona igual que la primera vez que vine. Hecho de menos a mi mujer que disfrutó tanto de esto la primera vez que vinimos.
José, Agus, Mikel y Nacho...MÁQUINAS!!
Jims estuvo aquí.
Seguimos camino mientras descendemos del sitio panorámico y aprovechamos para hacer una paradita a tomar café.
Espectacular.
La carretera serpentea por la montaña como un circuito de Scalextric.
Tras un pequeño túnel las vistas de amplían, comienza el descenso.
Ahí a la derecha esta el Edelweiss Spitze
La ultima vez que vine no nos paramos en este mirador... por eso hay que volver a ciertos sitios para descubrir cosas que pasamos de vista la primera vez por pura excitación y éxtasis motero.
El Grossglockner.
Tomando el sol como lagartijas.
Se lo pasaron fatal...
El sol se oculta tímidamente tras las montañas cuando terminamos las últimas curvas del Grossglockner hochalpenstrasse, magnífica forma de terminar una de las mejores carreteras de Europa.
Gustarle es decir poco.
Coches en periodo de pruebas y varios minis tuneados circulaban a todo gas por la Hochalpenstrasse.
Un poco de autopista para no perder la costumbre.
Una bonita carretera a través de bosques nos llevará hasta Annaberg im Lammertal. Tenemos reservado un modesto hotel el Annaberg Musikantenwirt donde nos sirven una de las mejores cenas del viaje. A dormir! que mañana tenemos cita con la razón de este viaje: el nido del águila.
Ver el Día 4!!
De vuelta al Grossglockner.
Mañana despejada, recogida de bártulos y puesta en marcha. Rutina que con los días, como siempre, se hace más rápidamente. Abandonamos Riva de Garda y volvemos a circular unos 100km por la autopista para llegar a Bressanone y posteriormente Brunico que nos marcará el camino hacia la legendaria Grossglockner hochalpenstrasse, 48km de puro placer motero. Cerca de San Candido, los Dolomitas nos miran celosas...no os preocupéis en unos años volveremos a vernos.
Lista para un bonito día de curvas?
Ready to go!
90km de autopista que ya empiezan a atragantarse un poco, pero es lo que hay.
Y más peajes, pero con alegría todo se lleva mejor.
Paradeta a merendar.
Espectaculares vistas, que si es la primera vez que pasas por aquí, no te podrías llegar a creer lo que hay de detrás...la espectaculares e inolvidables Dolomitas.
FOTO!
Volveremos...Volveremos...Volveremos...
Bienvenidos a Austria!
Si, justo desde donde hago la foto es donde nos decidimos parar a merendar...el sitio era perfecto jejeje
Pero mirando hacia el otro lado...
La puerta de entrada a la Grossglockner Hochalpenstrasse.
Ascendemos entre vistas fantásticas. La última vez que estuve por estos lares fue en junio de 2012. En esa ocasión la nieve era la principal protagonista del paisaje.
Preciosa.!
Y por fin el Glaciar!
Me emociona igual que la primera vez que vine. Hecho de menos a mi mujer que disfrutó tanto de esto la primera vez que vinimos.
José, Agus, Mikel y Nacho...MÁQUINAS!!
Jims estuvo aquí.
Seguimos camino mientras descendemos del sitio panorámico y aprovechamos para hacer una paradita a tomar café.
Espectacular.
La carretera serpentea por la montaña como un circuito de Scalextric.
Tras un pequeño túnel las vistas de amplían, comienza el descenso.
Ahí a la derecha esta el Edelweiss Spitze
La ultima vez que vine no nos paramos en este mirador... por eso hay que volver a ciertos sitios para descubrir cosas que pasamos de vista la primera vez por pura excitación y éxtasis motero.
El Grossglockner.
Tomando el sol como lagartijas.
Se lo pasaron fatal...
El sol se oculta tímidamente tras las montañas cuando terminamos las últimas curvas del Grossglockner hochalpenstrasse, magnífica forma de terminar una de las mejores carreteras de Europa.
Gustarle es decir poco.
Coches en periodo de pruebas y varios minis tuneados circulaban a todo gas por la Hochalpenstrasse.
Un poco de autopista para no perder la costumbre.
Una bonita carretera a través de bosques nos llevará hasta Annaberg im Lammertal. Tenemos reservado un modesto hotel el Annaberg Musikantenwirt donde nos sirven una de las mejores cenas del viaje. A dormir! que mañana tenemos cita con la razón de este viaje: el nido del águila.
Ver el Día 4!!
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